El delantero del Villarreal CF Roberto Soldado espera tener mañana el alta médica en sus manos, el último de los pasos para empezar a disfrutar de minutos esta temporada en la que ha estado seis meses parado por la grave lesión en la rodilla derecha que se produjo en el amistoso del pasado mes de agosto ante el Deportivo, en Riazor.

"La recuperación ha ido por buen camino y quizás la estabilidad que me da la rodilla ahora al entrenar es lo que adelanta un poco la reincorporación, pero al final estamos dentro de los plazos. Hace seis meses de la lesión y las sensaciones son buenas", ha explicado hoy Soldado, que incluso podría adelantar la fecha de reaparición marcada por su entrenador Escribá, que estimaba que la vuelta de los dieciseisavos de final ante la Roma, la próxima semana (23 de febrero), podría marcar el regreso del futbolista a los terrenos de juego. "Ya veremos… Es la opinión del míster, pero las sensaciones decidirán. Yo, conforme me siento ahora mismo, espero estar antes".