Eibar será un test de fuerza para el Villarreal. Un duro rival, con unas características de juego distintas, que pondrá a prueba el cambio de mentalidad y las modificaciones en la idea que ha venido introduciendo el nuevo técnico, Luis García, en los tres partidos que lleva al frente del equipo amarillo. Su gran obsesión, o más bien su necesidad prioritaria, es limitar al máximo las pérdidas de balón y conseguir una mayor fiabilidad en defensa.
Sin lugar a dudas, ha mejorado mucho el concepto global de sacrificio, la intensidad y también se ha progresado en la idea de bloque, pero los errores individuales, como ha venido aconteciendo durante toda la temporada, siguen restando e impidiendo sumar de tres en tres.
Y a mediodía de hoy (12.00 horas, Movistar+) llega un duro encuentro de exigencia física máxima, con apenas 72 horas para recuperarse de los golpes y el esfuerzo físico efectuado contra el Real Madrid el pasado jueves, dentro de una calendario de locura en los próximos días con el regreso de la Copa del Rey.
Ello obliga al técnico madrileño a meditar muy bien sus decisiones y el once que pondrá en liza ante el Eibar. Las sanciones de Álvaro y Jaume Costa por acumulación de amonestaciones, obligan, de partida, a dos cambios seguros en la alineación.
LAS OPCIONES DEL MÍSTER // El propio entrenador ya anticipó ayer que Mario ocupará el lateral derecho y que mantenía la duda de Pedraza o Layún en el carril zurdo. En el centro de la zaga regresará Funes Mori, lo que supondrá una garantía para blindar el espacio aéreo ante un rival para el que el juego directo es una de esas armas más peligrosas, junto con Bonera, quien podría regresar tras varios partidos ausente.
Las dudas del técnico aparecen de mediocampo hacia arriba, la línea que más desgaste físico sufrió ante el Madrid. Es en esa parcela donde más cambios pueden producirse. Toko-Ekambi, Bacca y Trigueros podrían entrar en la formación titular para dar descanso a jugadores como Cazorla, Fuego o Gerard Moreno.
Luis García ha tenido muy poco tiempo para preparar el partido en tierras vascas y continuar corrigiendo los fallos defensivos de los últimos encuentros. La mejoría en el juego colectivo ha sido notable, pero ahora se deben corregir los errores de concentración y de posicionamiento que han tirado por la borda el buen juego y las ocasiones de gol que está generando el equipo.
La atención en las acciones a balón parado es otro de los puntos importantes en los que ha incidido el técnico amarillo desde que tomara el mando de la nave grogueta en la recta final del pasado año sustituyendo a Javi Calleja.
LA REACCIÓN, DESDE DURANGO // El 2019 ha comenzado bien. En el conjunto amarillo, que pernoctó anoche en Durango, se es consciente de que Eibar es un buen punto de arranque para despegar y salir definitivamente de esa zona baja de la clasificación que atenaza los nervios de los jugadores y mete una presión añadida.
El estado del terreno de juego también será otro condicionante a tener en cuenta. Ayer, Eibar amaneció con cinco grados bajo cero. El frío puede perjudicar el césped, pero el peor enemigo para el Villarreal es él mismo. El Submarino, que pasó por encima del Real Madrid, no saldrá de vacío de Eibar. Toca ganar.
