Cuando las cosas van bien, no las toques. Es un axioma vital. En esa línea, no se esperan demasiados cambios respecto al once de partida del Villarreal que venció con comodidad a Osasuna, aunque alguna pincelada como la vuelta de Moi Gómez a la titularidad podría ser novedad hoy ante el Athletic.

El Submarino quiere volver a ganar en casa. El sábado, en El Sadar, rompió la racha de cuatro empates consecutivos con un contundente triunfo por 1-3. Ahora toca quebrar la de igualadas en casa tras no ganar ni contra Real Madrid ni Elche. Y el Athletic, precisamente, no es un rival cómodo como se encargaba de recordar el técnico de Hondarribia. Unai Emery no dribló ninguna cuestión y analizó con detalle los pormenores de la visita del conjunto bilbaíno a La Cerámica.

En cuanto a la enfermería, el doctor Adolfo Muñoz ha empezado a despejar jugadores de sus dependencias. A ello se refería Emery, quien explicaba los percances de Estupiñán y Foyth en Pamplona, así como el estado de Bacca: «Los que jugaron en Pamplona están bien. Pervis ha entrenado con normalidad y se siente mejor de las molestias. Foyth recibió un fuerte pisotón y no pudo continuar después del descanso. Ha probado a ponerse las botas y tiene buenas sensaciones. El día del partido entrenaremos (hoy para el lector) por la mañana y tomaremos las decisiones. Bacca cada día está mejor y muy cerca de hacerlo con la máxima intensidad. No sé si ante el Athletic estará ya, pero en caso contrario será el próximo partido».

El entrenador groguet argumentó su decisión de ubicar al central argentino como mediocentro: «Los entrenadores estamos para encontrar soluciones. Foyth tiene condiciones para jugar ahí y él enseguida dijo que sí. En esa posición también pueden estar Moi o Jaume, no de 6, pero sí en el centro del campo. No pienso en los que faltan, sino en lo que tenemos para competir».

El rendimiento de los chicos subidos del filial le ha dado oxígeno al equipo. La apuesta por la cantera en el Villarreal no es un adorno. «Si están ahí no es por un regalo, sino por exigencia. Lo difícil en el fútbol es encontrar la regularidad y tampoco dejar que los elogios te debiliten, aunque a todos nos gusta que nos regalen los oídos», aseveraba.

Las características del Athletic obligan a ajustes para frenar su juego de bandas, donde cuenta con futbolistas con gran proyección ofensiva, arrancando desde atrás o ya en la última línea. Lo mismo en cuanto al fútbol aéreo, una de sus especialidades. «Nunca he tenido un partido tranquilo contra el Athletic», explicaba. «Tienen al portero de la selección, dos laterales top como Yuri y Capa, la velocidad de Williams, el peligro de Raúl García…», añadía. Y no escatimaba palabras de elogio para su homólogo en el banquillo rival, pese a que está muy cuestionado: «Garitano le ha dado mucho al equipo y le ha metido en una final de Copa. Presionan muy bien y va a ser un partido de alta intensidad», concluía.