Cantar las veinte y a poder ser con una victoria en el Sánchez Pizjuán, con esa esperanza viajaba ayer el Villarreal a tierras hispalenses, donde esta tarde, a las 17.00 horas, el conjunto amarillo se mide al Sevilla con la cuarta plaza en juego, en un partido de reencuentros, con la vuelta al estadio de Nervión de Unai Emery, un técnico ahora en el Submarino que hizo historia con el club andaluz al conquistar tres títulos de forma consecutiva de la Europa League (2014-16).

El conjunto de la Plana Baixa afronta este encuentro tras no conocer la derrota en los últimos 19 duelos oficiales disputados, si bien en la competición liguera se ha dejado muchos puntos debido a los numerosos empates cosechados, por lo que debe ganar a un Sevilla que cuenta con dos partidos menos si pretende seguir pujando por la cuarta plaza.

Los groguets tiene tres puntos más, 26, que los hispalenses, pero nadie oculta el potencial del conjunto de Julen Lopetegui. Es por ello que ayer, Emery le quitaba importancia a la racha, pero no a los puntos en juego. «Las estadísticas son un punto de referencia, en mi último club estuve 22 partidos sin perder, pero estas rachas no me hacen cambiar. Vamos partido a partido y pensando que cada partido es único, pensar en los tres puntos y en la dificultad del rival», explicó, insistiendo en el difícil oponente: «Tenemos un rival duro y en un partido en el que se verán muchas cosas. Nos enfrentamos con un rival que está arriba y que queremos estar con ellos. Ese es nuestro reto, partido bonito y que tienen empaque, es un partido que llama la atención».

DAR UN PASO AL FRENTE / Pese a la buena temporada que lleva el Submarino hasta la fecha, Emery no quiere que ello nuble a sus futbolistas. Es más, considera que llega el momento de romper la dinámica empatadora en Liga (seis de los últimos cinco partidos), pese a la entidad del rival. «No podemos parar en los elogios, estamos sin perder, pero los empates nos penalizan. Nos imponemos exigencia de mejorar y crecer. Tenemos un equipo con experiencia y que ayuda a los jóvenes, pero nos falta dar un paso más. Estamos compitiendo, pero no podemos cerrar los partidos con victorias. Sabemos que debemos dar ese paso, que seamos capaces de ser más efectivos», analizó el técnico amarillo.

PEDRAZA Y FER NIÑO / En lo deportivo, Emery solo podrá contar con una de las tres figuras destacadas para el sevillismo con las que cuenta el Villarreal en sus filas, como el colombiano Carlos Bacca, que entró en convocatoria, y los lesionados de larga duración Vicente Iborra o Alberto Moreno.

El internacional cafetero podrá reaparecer después de varias semanas lesionados ante sus excompañeros, mientras que siguen de baja los lesionados Paco Alcácer, Mario y Coquelin, en un choque de alta tensión e intensidad para posicionarse, por derecho propio, en la zona de Liga de Campeones y entre dos conjuntos sólidos y ambiciosos, con una identidad muy marcada y en consonancia a sus respectivos técnicos.

Como curiosidad, será el primer duelo Lopetegui-Emery, dos guipuzcoanos que han imprimido su carácter a sus equipos, aunque con un mejor bagaje provisional para el técnico de los amarillos, con diecinueve partidos seguidos invicto entre todas las competiciones --incluido el del Qarabag que la UEFA le dio por ganado--, frente a los cuatro que llevan sin perder los hispalenses.

Con vistas al once que dispondrá Emery, falta por resolver la duda en el lateral izquierdo, donde podría entrar Pedraza o seguir apostando por Estupiñán, mientras que la otra sería dar continuidad a Fer Nió como ‘9’ o alinear ahí a Gerard y buscar un extremo más veloz para la banda derecha.

Así, Asenjo estará en portería; Rubén Peña, Albiol, Pau y Pedraza o Estupiñán formarán la defensa; Foyth continuará de pivote junto a Parejo y Trigueros en la medular; y Moi Gómez, Gerard Moreno y Fer Niño en la delantera.