La crisis de la Covid-19 obliga a la mayoría de clubes a rebajar su previsión de ingresos entre un 20 y un 30%. Hasta ahora, lo que sí es una certeza es el proceso de devaluación que ha sufrido el Valencia desde que está en manos del magnate Peter Lim. Disparado desde hace tiempo el Atlético de Madrid, el Sevilla también ha despegado y el próximo en disposición de hacerlo es, precisamente, el rival che esta tarde, el Villarreal.

La entidad amarilla, junto a la Real Sociedad, es una excepción en el complicado panorama actual. La entidad liderada por el empresario valenciano Fernando Roig prevé un presupuesto ligeramente superior al de la campaña anterior.

El aumento de calidad en la plantilla repercute en los costes. El presupuesto subirá cerca de diez millones en relación con el del año pasado, acercándose a 140 millones. «La apuesta por fichar grandes jugadores, hace que este presupuesto deba aumentar», dijo Fernando Roig.

Las apuestas amarillas

Una de las incorporaciones mediáticas de los amarillos se encuentra en el banquillo. A Unai Emery, al que han dotado de recursos en forma de seis fichajes, le sobra experiencia en la Liga con el Valencia en la carrera por un sitio entre los cuatro primeros. Un objetivo con el que no cumplió en Sevilla, aunque compensó a la afición de Nervión con tres títulos de la Europa League. Mientras en el Villarreal han llegado Rulli, Foyth, Estupiñán, Dani Parejo, Coquelin y Kubo como fichajes, en el Valencia ha sido un verano de recortes severos.

Las previsiones presupuestarias, que se presentarán antes de fin de año, han caído de los 180 millones de la temporada 2019/20 a los 110-120 millones. Del récord histórico, a cifras muy similares a las que se presupuestaban en la etapa previa a Meriton Holdings. Una verdadera muestra de como la irregularidad deportiva de un Valencia de dientes de sierra se extiende al terreno económico.

Otro aspecto preocupante en la economía del Valencia en la presencia en la plantilla de un número menor de activos de peso en el concierto europeo. Los principales, a día de hoy, son Maxi Gómez, José Luis Gayà, Carlos Soler o Kondogbia, a la espera de que, de la mano de Javi Gracia, Guedes pueda recuperar la cotización.

Atendiendo al ranking del CIES de las plantillas más caras en materia de traspasos sin incluir salarios, el Valencia tiene una treintena de equipos por delante y el Villarreal ocupa el lugar 49 tras gastar algo más de 30 millones.