Siempre fue el número uno en la agenda del Villarreal. El club llevaba varias semanas trabajando su incorporación, desde que los técnicos decidieron que Zambo Anguissa era el elegido. Se analizaron otras opciones pero siempre como alternativas de recambio por si no fructificaba la opción de incorporar al internacional camerunés. Y por fin, Zambo Anguissa llegó al hotel de concentración del Villarreal pasadas las 13.00 horas del sábado. Se hizo esperar tanto su llegada, como su fichaje por el club amarillo. Estaba previsto que se incorporará el día antes, pero las premuras de tiempo hicieron que perdiera la conexión del vuelo en París y tuviera que pernoctar en la capital gala. Luego, sus maletas se extraviaron en el aeropuerto de Frankfurt y tuvo que enfrentarse a los atascos en la carretera hasta poner punto y final a su accidentado viaje en el hotel Panorama Royal, donde está hospedado el equipo amarillo. No pudo trabajar con sus compañeros por la mañana. Apareció por la puerta casi de sorpresa con una bolsa, cara de cansado pero con una sonrisa de oreja. El guardameta Andrés Fernández ejerció de improvisado recepcionista para darle la bienvenida antes de que llegará su buen amigo Toko Ekambi, el hombre que ha sido decisivo para que se decantara por la oferta del Villarreal.

Como informó Mediterráneo, Zambo firma por una temporada por el Villarreal con una opción de compra no obligada cifrada en 25 millones de euros, cinco menos de los 30 que pagó el Fulham por su fichaje hace solo un año al Olympique de Marsella. Después de un año bastante negativo para el camerunés tanto en el aspecto individual como en el colectivo, puesto que el Fulham descendió de categoría, el internacional camerunés pretende volver a tomar impulso en su carrera pero ahora vestido de amarillo. “El Villarreal me va a ayudar a ser mejor jugador y mejor en todos los aspectos”, explicaba el nuevo mediocentro del Submarino.

EKAMBI, SU EMBAJADOR

Ekambi lleva semanas convenciendo a Zambo de que su futuro estaba en Vila-real. “Durante la concentración para la Copa Africa, Toko me ha estado contando cómo era el Villarreal como club por dentro y explicándome todo lo que necesitaba saber para decidirme por venir al Villarreal”, aseguraba en francés, con el delantero ejerciendo de traductor.

Quería jugar en la Liga española que es uno de los mejores campeonatos del mundo. En España se juega un fútbol muy técnico, y el Villarreal es uno de los equipos que mejor lo interpreta”, añadía el jugador cedido por el Fulham. “Ya conocía al Villarreal porque lo he visto jugar y sabía que era un club serio y organizado. Creo que es una buena elección para mi”, aseveraba Zambo. A la vez se definía como un jugador “técnico, de largo recorrido y que recupera muchos balones”.

Calleja ya tiene la añorada pieza que necesitaba para dotar de equilibrio a un centro del campo plagado de futbolistas con talento como Moi Gómez, Cazorla, Morlanes o Trigueros. Músculo y centímetros para la medular.