Para mitigar el calor propio de la época estival, pocos remedios más efectivos que refrescarse en una terraza con una bebida bien fría disfrutando de la brisa del mar. Esto, y mucho más, es lo que ofrece Moll de Costa, un nuevo concepto de terraza recién estrenada en el Grau de Castelló.

Con una espectacular y acogedora terraza, Moll de Costa abrirá durante este mes de junio de viernes a domingo desde las seis de la tarde hasta las dos de la madrugada. Posteriormente, en julio y agosto abrirá ya los siete días de la semana aunque en principio también en servicio solo de tarde y noche. 

La cerveza bien fría, uno de los mejores bálsamos para evitar las altas temperaturas estivales si se bebe con moderación. ERIK PRADAS

El establecimiento abierto por Bea Artero explora un nuevo concepto de terraza; un espacio al aire libre, frente a los veleros atracados en el puerto, en el que poder disfrutar de un gran ambiente. Los muy cerveceros podrán disfrutar de una caña de San Miguel o Radler, o un zurito o un tanque. Y si son de botellín, podrán beber una Alhambra verde, Alhambra roja, Mahou y San Miguel sin gluten para los celíacos. En cuanto a refrescos y zumos, habrá de todo. Y respecto los combinados habrá infinidad de referencias en ginebras, rones, vodkas y güisquis. Por supuesto, también bebidas premium. La terraza Moll de Costa es el lugar ideal para tomar unas copas con amigos, con pareja o en familia.

La comida en la terraza será de máxima calidad para el disfrute de los comensales. ERIK PRADAS

Respecto a las cenas, pues de momento no hay servicio de comidas, Moll de Costa ofrece la máxima calidad de un menú cerrado a diario que consta de bocadillo/tostada, cerveza, dos tapas al centro de la mesa y carajillo de ron cremaet. Todo por solo 12 euros. La diferencia frente a otros establecimientos es la calidad del producto. Por ejemplo, la ensaladilla rusa es la que preparó durante años María Cinta en su parada de salazones del Mercat de Sant Antoni, en la Ronda Magdalena. En la actualidad ha cogido el testigo su sobrino Carlos, que vende la misma ensaladilla en la misma parada. Sin duda una de las más buenas de todo Castelló. O la inmejorable tortilla de patata, que la prepara diariamente Rosana en el mesón Los Alfares de la avenida Hermanos Bou.