Muy dulce, sabrosa y vitaminada para los responsables de la Fundación Síndrome de Down de Castellón, José Nomdedeu y Tomás Ramos, y a todo su equipo por la iniciativa de implicar a gente la música como Álex Ubago en la solución de los problemas del colectivo, y por conseguir unir las voces de cerca de 3.000 almas en un concierto que se recordará en La Pérgola de Castellón como uno de los más apasionantes y llenos de interacción juvenil de los últimos tiempos.
