Estaba resignada a no presidir la Asamblea de Madrid cuando, gracias a la traición de dos diputados socialistas, María Concepción Dancausa Treviño (Burgos, 26-2-1952) fue elegida el martes presidenta del Parlamento autonómico. En febrero, hubo de renunciar a la importante Secretaría General de Asuntos Sociales para ir la cuarta en la candidatura encabezada por Esperanza Aguirre. No fue una opción fácil: las encuestas pronosticaban la derrota del PP frente a la izquierda. Dancausa fue leal a la causa y ahora, de rebote, ha logrado el sillón presidencial.

Hija de un alcalde de Burgos en la época de Franco, esta funcionaria de carrera, compañera de estudios y amiga de Ana Botella, tuvo su primer cargo importante nada más llegar Aznar a la Moncloa: directora general del Instituto de la Mujer. Después, en el 2000, fue nombrada secretaria general de Asuntos Sociales. Gran parte de su tiempo lo ha consumido justificándose: "Si no fuera feminista, no habría asumido la dirección del Instituto de la Mujer (...) No estoy a favor del cuarto supuesto del aborto (...) No pertenezco a ninguna organización religiosa (...) No hay más violencia doméstica ahora, lo que pasa es que ahora está saliendo a la luz (...) Tememos que una excesiva difusión de estos temas invite más a maltratar"... ¿Es responsable del machismo asesino la prensa canallesca?