Los gobernantes se esfuerzan cada día en hacer llegar a los ciudadanos el mensaje de lo mucho que quieren hacer en los próximos años y la gran cantidad de euros que piensan dedicar a una y otra obra faraónica. Importantes carreteras, ferrocarriles de ida y vuelta en un plis plas, inimaginables parques temáticos... y toda un serie de mejoras de futuro.

Lo que no se paran a preguntar las grandes mentes pensantes es el tipo de proyectos e iniciativas que nuestros jóvenes -que serán en definitiva a quién irán destinados- necesitarán en el futuro.

En las 10 preguntas que propone MEDITERRÁNEO sobre el Castellón del futuro puede encontrarse respuesta a muchas interrogantes. La juventud se plantea propuestas innovadoras y bastante alejadas de los formatos que manejan los políticos, que posiblemente se sorprenderían al escuchar que más que grandes auditorios o magnas salas de exposiciones, lo que reivindican son locales de ensayo para los grupos musicales de todo tipo, desde el rock más duro a la música de cámara; que las zonas de ocio deben tener este y aquel componente para hacerlas más atractivas; que en las instalaciones deportivas deben primar otras disciplinas que no son precisamente el fútbol y el baloncesto, por poner algunos ejemplos.