Fresquita y con olor a pólvora para José Vicente y Jorge Caballer, haciéndola extensiva asimismo a su padre José El Chato, por conseguir alzarse con el triunfo de la décima edición del Concurs de Mascletaes Ciutat de Castelló y por habernos deleitado con un espectáculo que los castellonenses recordarán durante tiempo. Hasta el inicio del 2005.