Me resulta francamente incomprensible por lo incoherente, el comportamiento por parte de diferentes políticos sobre el reparto de la escasa agua potable que existe en España y la manera como a través de los medios de comunicación se azuza a todos sobre este problema de tanta magnitud. Todo ello me impulsa a escribir sobre este tema, aunque afortunadamente constato que hay personas con el suficiente sentido común como el señor José Manuel González, quien en Mediterráneo del pasado 22 de junio manifestaba claramente sobre el PHN que valdría más discutirlo serena y ampliamente --pues a todos nos concierne-- para llegar a un consenso en vez de ir a pleitos y violencias buscando romper la baraja. Esto hasta encontrar la posibilidad de obtener los mejores resultados a fin de encontrar soluciones satisfactorias que las hay, tanto para los contribuyentes pagados como de los usuarios, aunque teniendo en cuenta que lógicamente el destino de este imprescindible y vital elemento, según sea para usos domésticos, para riesgos agrícolas, usos industriales o fines lúdicos.

Y digo esto, porque es preferible discutir con pleno conocimiento de causa por parte de todos que reñir sin conocer ni el cómo ni el por qué de algo que ignoramos y que antes unos dijeron que si y otros que no, y después procedieron a la inversa inexplicablemente.