El 82% de la superficie de monte de la provincia de Castellón, que asciende en total a 416.388 hectáreas, es de propiedad privada. Una cifra que sitúa a la provincia a la cabeza de la Comunidad Valenciana en lo que se refiere a la extensión de este tipo de suelo y que obliga a la necesaria colaboración entre los propietarios y la Administración a la hora de establecer convenios de protección, prevención y conservación.

Hoy celebramos el Día Mundial del Monte y los antecedentes en Castellón no son halagüeños. En tal sólo unos días hemos conocido varios incendios de superficie forestal debido a las condiciones de sequedad y a los fuertes vientos, que han puesto a prueba este tipo de medidas.

En este sentido, la responsabilidad no debe recaer únicamente en la Administración pública, que la tiene --este año se ha aumentado el presupuesto de protección a 75 millones de euros-- según recoge la ley autonómica de 1993, sino también en los propietarios de suelo forestal, a los que la ley también obliga a intervenir, especialmente en lo referente a la conservación y mantenimiento, un aspecto muchas veces olvidado.