Da la impresión que se haya puesto de moda --vaya gracia, por cierto, que nos hace a los productores-- que no existan precios en el campo o que estos sean tan bajos que en muchos casos no lleguen ni a compensar los costes de producción. Pasan las campañas y, lejos de cambiar esta manera de proceder tan desaprensiva, pasa todo el contrario: el precio está por tierra o no tenemos ni precio por nuestros productos.

Me da la sensación muchas veces que la mayor parte de los comerciantes se ponen de acuerdo para fastidiarnos con el precio. Es como si un día se juntaran todos y decidieran que la estrategia es fijar este precio y no dar más a partir de esta cantidad, o también, porque no, utilizar la fórmula de a "comercializar" como ocurre en los cítricos.

A nosotros, como ciudadanos, cuando vamos a comprar una cosa en un supermercado o vamos al taller a arreglar el coche no nos bajan los precios, más bien todo lo contrario, detectamos que son cada vez más elevados. No conozco otro sector que no sea el agrario donde suceda lo que sucede con los precios.

La verdad es que en el sector agrario todo el mundo gana dinero a expensas de lo que deja de ingresar el agricultor. El comerciante, el del transporte, el de las mallas, el de la tienda de fertilizantes, los collidors... Todos excepto el agricultor, que ve como su bolsillo está cada vez más agujereado. Somos los únicos a los que hacen lo que quieren con el precio porque nadie lo impide. Cuando los gobernantes, sean del partido que sean, se den cuenta que en el tema del precio está la madre del cordero y dejen de mirar hacia otro lado ya habremos avanzado un poco.

No se dan cuenta que un sector donde no hay precio que defender es un sector sin futuro. Y esto es lo que está pasando en nuestro sector productor de cítricos. Ante esta situación hay una clara tendencia a su desaparición o, tal vez, lo que hay es una estrategia de reconversión y de abandono de los actuales productores para que quede el sector en manos de unos pocos, de grandes empresas que buscan el beneficio rápido sin tener en cuenta otras variables como las del mantenimiento del territorio y la fijación de población en nuestras zonas agrarias.

Delegado Provincial de la Unió