USTED PUEDE ENVIAR SUS CARTAS A TRAVÉS DEL E-MAIL:

Los ecologistas y

las desigualdades

Cuando era pequeño no recuerdo que hubiera ecologistas, sí recuerdo que había menos incendios porque los montes estaban más limpios; hubo heladas y los cítricos, almendras, alcachofas, etc... sufrieron las consecuencias, pero los agricultores seguían adelante y además, eran los ricos de la época, más valía tener frutas y verduras para comer, que dinero. Luego, llegaron las cooperativas y seguían defendiéndose, y los artículos tomaban la denominación de origen, por ejemplo: la alcachofa de Benicarló; y finalmente, llegaron los intermediarios y los ecologistas. Los primeros, duermen a pierna suelta y si hay tormentas o pedrizas, el negocio es más grande. Y de los ecologistas, ¿qué les voy a contar si saben más que yo?

Desde que presencié una manifestación ecologista por los años 90, que llevaban caretas y se las quitaban para fumar, y después vi, alguno con motos sin tubo de escape y que para ir por ciudad usan sus coches, y que la última vez que se quemó el Desierto dijeron que cada uno plantaría un pino, me di cuenta que aparecen y desaparecen cuando quieren, pero que cuando aparecen es para crear problemas. Por ejemplo: la Marjaleria hace años que no se fumiga, porque puede desaparecer el chorlitejo común y el samaruc; el aeropuerto lleva retraso porque perjudica al aguilucho cenizo; el mejillón tigre, ahora la polilla suramericana que perjudicará, pero no piden responsabilidad a las aduanas.

Pero lo grave está por llegar. Todos los días entran cientos de subsaharianos en cayuco, pero a ninguno los ponen en cuarentena en el hospital para hacerles las pruebas pertinentes; los dejan y campan a sus anchas, muchos portadores de enfermedades como la malaria o sida, sin embargo, nosotros, para ir a esos países nos tenemos que vacunar y tomar medidas. Viva nuestra Administración y nuestro ministro de Sanidad.

Joaquín Cornelles.

Adaptació de les

oficines del Servef

El propassat dia 3 d´agost van presentar-se en les oficines del Servef del carrer Herrero, les signatures de prop de 600 ciutadanes que, tot reivindicant la igualtat d´oportunitat de les personjes amb diversitat funcional (o discapacitat, com s´anomena oficialment) i acollint-se al que diu l´art. 4 del Decret 39/2004, de 5 de març, del Consell de la Generalitat, pel qual es desplega la Llei 1/1998, de 5 de maig, de la Generalitat, en matèria d´accessibilitat en l´edificació de pública concurrència i en el medi urbà, subscriuen un escrit en què sol.liciten l´adaptació de les esmentades dependències del Servef perquè aquestes siguen accessibles a les persones amb diversitat funcional.

En l´escrit es diu que, entre d´altres deficiències, destaquen dues infraccions de la llei: el brancal que hi ha a l´entrada, que impossibilita del tot l´accessibilitat d´una persona amb cadira de rodes; i el mostrador principal d´atenció al públic, que té una alçària que fa impossible que les persones d´estatura baixa o amb cadira de rodes siguen ateses com cal.

Aquestes anomalies fan que una persona amb diversitat funcional no puga realitzar cap gestió en aquestes oficines sense demanar l´ajuda d´una tercera persona. Fet que encara resulta més incomprensible si pensem que hi ha una borsa de treball per a discapacitats.

Per cert, en fer el lliurament de les signatures ens vam assabentar d´una altra deficiència: vam preguntar si hi havia lavabos adaptats i ens van respondre que ni adaptats ni de cap classe! Així que les ciutadans que van a fer-hi gestiones i que, de vegades s´han d´esperar hores, han de retenir les seues necessitats fisiològiques.

Per acabar, volem agrair la solidaritat de tantes persones que hi han signat i aprofitar aquesta ocasió per denunciar, una vegada més, l´incompliment reiterat de lleis i normes que atenyen de manera directa el reconeixement i la protecció dels drets de les persones amb diversitat funcional.

Cèsar Gimeno i Nebot, Mar Dalmau Caselles i Manuela Almela Pascual.

Col.laboradores del Grup d´Investigació, sobre Discapacitat Fundació Isonomia per a la Igualtat d´Oportunitats.

Los pinos maltratados de nuestras rotondas

Me encantan las rotondas, unas con bonitas flores y plantas bien cuidadas, otras con detalles en el centro como alguna escultura, otras con sus bonitos surtidores de agua que refrescan y alegran la vista; pero hay una que como yo, muchos vecinos que tienen que rodearla todos los días, tiene en el centro unos cuantos pinos preciosos, casi ahogados y apenas visibles, por la cantidad de hierba seca que rodea toda la rotonda. Estos pobres pinos solo aspiran a que una vez al año sieguen su hierba.

Me refiero a la rotonda que está en la entrada del ermitorio de la Magdalena, acceso al Desierto. ¡Qué alegría me dará el día que, como decía mi abuela, por un casual, pueda ver pinos respirar libremente, porque alguien se ha preocupado de segar la mala hierba!

Goya Martínez Sáenz-Torre.