A medida que se acerca el otoño, y con él la fase de expansión de la gripe A, las autoridades sanitarias van concretando las medidas para combatir una enfermedad que inevitablemente, según anuncian los expertos y la propia Organización Mundial de la Salud, adquirirá proporciones de pandemia. En España, la ministra Trinidad Jiménez y los consejeros de las distintas comunidades autónomas mantuvieron ayer una nueva reunión para aunar estrategias y reforzar la unidad de acción. De la cita de ayer en Madrid surgió un cambio en cuanto a la población de riesgo que será vacunada en primer lugar: se considera que los menores de 15 años ya no deben inmunizarse de forma colectiva. Más allá de las medidas concretas desde el punto de vista médico y sanitario, cabe resaltar que el Gobierno, la oposición y la clase política en general están mostrando seriedad al afrontar la crisis sanitaria que se avecina, sin haber caído en la pésima tentación de convertir en polémica de bajo vuelo un problema. No debería ser necesario hacerse eco de esta actitud responsable, pero llama positivamente la atención por ser infrecuente. Que no se tuerza esta dinámica.