La televisión digital terrestre se transmite por ondas electromagnéticas terrestres como la televisión analógica convencional. La recepción se efectúa a través de la misma antena actual, a diferencia de la televisión digital vía satélite o por cable que utilizan otros medios (antena parabólica, cable).

Además, para disfrutar de la televisión digital terrestre (TDT) no es necesario pagar ningún tipo de cuotas, a diferencia de las plataformas digitales por satélite o cable, que son de pago.

Asimismo, se puede ver la televisión analógica y la televisión digital a través del mismo receptor siempre y cuando se disponga de un receptor de TDT (externo o integrado) y se haya adaptado la antena (individual o colectiva). Actualmente, se está emitiendo en digital y, hasta la fecha del apagón analógico (1 de enero de 2012), coexistirán el sistema analógico y el digital.

El precio de los receptores externos (o Set-top box) oscila entre 75 € y 400 € en función de las prestaciones, y el precio de los televisores digitales integrados (iDTV) entre 400 € y 2.000 €.