La muerte súbita causa cerca de 40.000 fallecimientos al año solo en España. En el 80% de los casos está asociada a una enfermedad coronaria, pero el otro 20% suele producirse en personas jóvenes, deportistas o bebés (muerte súbita del lactante), donde esta suele estar causada por enfermedades genéticas hereditarias. Por esto es importante que, si en la familia existe algún antecedente, se realicen análisis genéticos a los miembros para evitar otro caso.

Practicar deporte es sano, ya que está demostrado que mejora todos los parámetros de factores de riesgo de enfermedad cardiovascular. Sin embargo, practicarlo de forma asidua o a nivel de competición entraña cierto riesgo, de ahí la importancia de someterse a controles médicos sobre todo en niños, que dejen de ser un mero trámite burocrático, y en personas que retomar la actividad física o en los mismos atletas, para detectar problemas cardiacos ocultos puede reducir la muerte súbita. La implantación de desfibriladores permitiría evitar el 20% de las muertes súbitas. H