A menos de 100 días para las elecciones municipales, quiero hacer una reflexión sobre la importancia del resultado de las mismas para cada pueblo, o ciudad.

Siempre he creído que el ejercicio del voto en unas elecciones es mucho mas que un derecho, sobre todo en unos comicios municipales donde se decide el día a día de nuestras vidas.

De otra parte, opino que cada voto depositado es una gran responsabilidad para quienes nos dedicamos a gestionar los recursos de nuestros vecinos.

No me pasa inadvertido el desencanto de una parte de los ciudadanos con la política, pero permítanme que ponga en valor el trabajo diario de muchas personas dedicadas a esta noble tarea y que, día a día, nos esforzamos por trabajar en nuestros municipios para mejorar la calidad de vida de nuestros vecinos.

No creo que este sea el momento para políticas revolucionarias que pretendan destruir lo construido con una crítica fácil, ni momentos de promesas disfrazadas de quimeras, que no son mas que antiguas ideas ya fracasadas que cayeron con el muro de Berlín y que, actualmente, están sumiendo en la mayor ruina a países latinoamericanos que devenían en economías pujantes. Creo que España se ha construido y crecerá desde el consenso, no desde la ruptura. H

*Alcaldesa de Benicàssim