Querido lector:
Si convertimos la adquisición del necesario acelerador lineal para el tratamiento con radioterapia del cáncer del Hospital Provincial en una pelea política, mal vamos. En la pasada precampaña para las elecciones municipales y autonómicas ya fue convertido en uno de los temas recurrentes para la batalla electoral a causa de sus averías, los aplazamientos de tratamientos o traslados de pacientes a Valencia producto de la finalización de la vida útil del aparato. Luego, acabó la campaña y finalizaron las averías.
Ahora, casi un año después y tras el acuerdo adoptado en septiembre en el Consorcio que gobierna el citado centro hospitalario para la licitación de uno nuevo, llegan otra vez los problemas entre las dos instituciones responsables: la Conselleria de Sanidad (PSPV) y la Diputación (PP). La primera argumentando que para la licitación del aparato debe procederse a través de un convenio entre ambas instituciones con aportación de millón y medio de euros cada una y la segunda, que la inversión debe realizarse por parte del Consorcio que dispone de presupuesto anual aportado por ambas instituciones para el cual ya aumentó su parte con ese millón y medio.
Un rifirrafe de procedimiento administrativo que no hace sino esconder la guerra política por el dominio del hospital entre ambas instituciones y por la sucesiva intención por parte de la Generalitat del control del presupuesto de las diputaciones. Todo ello en un contexto presupuestario concreto en que la Generalitat ha incrementado este año casi un 50% su aportación al Consorcio del Hospital Provincial de Valencia que comparte con la Diputación valenciana (80 millones) por tan solo un aumento del 6% de su aportación para el de Castellón (3 millones). Y por supuesto, dentro del contexto de la intencionalidad del Consell de pasar progresivamente el Hospital Provincial a la red sanitaria autonómica.
En definitiva, una guerra política que el ciudadano despreciará porque lo que valora es el servicio adecuado. Y recuerden, es quien en última instancia lo paga.
