Estamos a 22 de julio, todavía queda más de una semana para que los presupuestos del año 2020 pasen por el pleno del Ayuntamiento de Castellón y en el mejor de los casos casi un mes y medio para que entren en vigor. Por tanto, siendo optimistas, tendremos presupuestos 2020 en septiembre.

El dato que les acabo de dar en sí mismo debería hacer sonrojarse a los 15 concejales que sustentan con una amplia mayoría al tripartito liderado por el PSOE en Castellón. Si a esto le añadimos que llevan meses sin ponerse de acuerdo con las cuentas por sus luchas internas de poder, pero que sí que llegaron a un acuerdo para subirse un 50% los sueldos en apenas 5 minutos, deberían hacerles reflexionar ante su habilidad para asegurar sus privilegios que contrasta con su gestión mejorable.

Este pasado fin de semana tuve la ocasión de asistir al congreso provincial del PP de Alicante. Allí tuve la oportunidad de hablar con el alcalde de Madrid, Martínez-Almeida , que ha destacado con su gran gestión en plena pandemia contrapuesta al inmovilismo que hemos vivido en Castellón. Almeida se sorprendió cuando le comenté que aún no teníamos presupuestos, ya que en Madrid los aprobaron el 23 de diciembre .

Para escarnio a los lectores por parte de este gobierno municipal, en plenos rebrotes de la pandemia del covid-19 y con unos recursos públicos que deberían estar enfocados en comprar mascarillas y test para los castellonenses como han tenido poblaciones vecinas o en ayudas a autónomos y comercios (propuestas que el PSOE siempre ha vetado al venir del Partido Popular), el tripartito ha decidido comenzar una reforma del Palacio Municipal mejorando sus despachos cuando la ciudad tiene ahora mismo mil y una prioridades, y ninguna es esta. H

*Secretario General y Portavoz Adjunto PPCS