CARTA AL DIRECTOR

Decía el portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique , que no se podía bajar el IVA del recibo de la luz porque eso no significaba ningún coste para las eléctricas. ¿Y si el Gobierno obligase a las empresas suministradoras de energía a suprimir de la factura el término de potencia, y se obligase a sí mismo, pues es quien lo cobra, a la supresión del impuesto de electricidad? Uno de los puntos oscuros del recibo de la luz es ese apartado que nos cobran cada mes por la potencia contratada, y que no tenemos claro cuál es el coste que tiene la compañía eléctrica para repercutir una cantidad en cada recibo por esa potencia contratada pero no controlada por el usuario.

En el suministro a través del mercado regulado es el Gobierno quien determina la tarifa del término de potencia. Ese es un punto desde el cual se puede abaratar la factura. Otro podría ser el impuesto de electricidad, que es del 5,11% sobre la potencia y el consumo y que se queda el Estado. Si el Gobierno, en una factura de unos 50 euros, suprimiese esos dos pagos, el ahorro para el consumidor sería de unos 16 euros. Animo al vicepresidente de asuntos sociales y a sus ministros de Unidas Podemos a emprender ese camino. H

Joan Sada