Ximo Puig se ha propuesto arruinar a todo aquel que no sea familia o allegados y, tal es así, que la hostelería lleva casi un mes con la persiana bajada, y no es solo eso, es que además han sido brutalmente despreciados por parte de la izquierda.

Una de las personas de confianza de Pepe Martí , el presidente de la Diputación de Castellón, a través de un tuit, aseguraba que los hosteleros trabajan en negro, con su personal sin asegurar y mal pagados. Si esto fuera poco, sale al día siguiente la vicepresidenta del Consell Mónica Oltra , quitando legitimidad al presidente de Ashocas, porque según ella conduce un coche de 150.000 euros, podría ser igual de crítica con Pedro Sánchez , que lleva un coche de 498.000 euros, con la diferencia sustancial de que este lo pagamos todos, por no hablar de cuando se viene de fiesta con sus amigos a ver el FIB, con el Falcon, todo muy austero, y muy público.

El problema es que esto es lo que piensa de verdad la izquierda: que el empresario es siempre malo. Se olvidan, sobre todo la irresponsable de Oltra, de que su sueldo lo pagan los empresarios, los autónomos a los que desprecia, con sus impuestos. Y les molesta, sobre todo, que la gente proteste (si es contra sus decisiones, porque cuando las protestas y las camisetas eran contra el PP, era libertad de expresión y merecidas).

Desde el PP de Castellón le hemos pedido a Ximo Puig que reabra cuanto antes la hostelería, que deje de castigar al sector o que muestre los informes técnicos en que basa sus decisiones políticas.

En lugar de eso, se dedican a ocultar los datos reales de contagios, ocultar la información solo va en contra de la salud de los vecinos de Castellon. Desde el PPCS hemos mantenido reuniones de trabajo con alcaldes y portavoces de la provincia para reclamar una mayor transparencia a la Conselleria de Sanidad, que está mintiendo de forma sistemática a los alcaldes y en estos momentos esas actitudes van en contra de la salud de los vecinos, por eso nos hemos reunido con los alcaldes y portavoces de los municipios más afectados por los contagios con el objetivo de ayudarles a poder reconducir la situación y a tramitar todo aquello que deben hacer frente desde la administración local, es obvio que dar información veraz es clave ahora mismo para que las administraciones locales puedan hacer bandos, desinfecciones, pedir restricciones o perimetrar los municipios si es necesario.

Pero en lugar de ello, la Generalitat ha perdido el control de la pandemia, de la realidad y del sistema, tenemos un gobierno desnortado, vencido por las circunstancias que no merece Castellón. Ojalá no haya que acudir a los tribunales, y se produzca de una vez la apertura de la hostelería, creo que es bueno que vendan muchas tapas de sentido común. H

*Diputada provincial del grupo popular en la Diputación de Castellón