Nueve meses, el tiempo que se necesita para concebir una vida, es lo que va a tardar el gobierno municipal de Castellón en resolver la petición de ayudas a nuestras pymes y autónomos. Nueve meses de tardanza que paradójicamente pueden ser su muerte.

Una prueba más de la falta de sensibilidad de la alcaldesa socialista con todos esos trabajadores por cuenta propia y pymes que necesitan apoyo ¡y lo necesitan ya!

Se están desangrando y algunos ya no tienen ni para comer, pero tendrán que esperar hasta Navidad para saber si van a recibir alguna ayuda. A lo peor, en diciembre ya no habrá persiana que levantar.

Han convertido el Ayuntamiento en la Casa de los Líos porque los tres partidos de izquierda no se aclaran. Y lo pagamos muy caro los castellonenses, poniendo en peligro el futuro de muchas familias. Y es que despropósito tras despropósito, Marco se ha convertido en la imagen de la ineficacia política. Nadie sabe dónde está la alcaldesa en plena pandemia y con una economía al borde de la quiebra.

Las dos medidas mas importantes que ha tomado desde que llegó han sido subir sus sueldos un 50% y reformar palacetes. ¡¡¡El municipal 500.000 euros y el de Borrull 15 millones de euros!!!

¿A cuántos autónomos se puede ayudar con ese dinero? ¿Cuántas familias se pueden rescatar con ese dinero? ¿Cuántos impuestos se pueden bajar con ese dinero?

¿Se lo imaginan? Pues dejen de imaginar, porque se pondrán igual de nerviosos que yo mientras escribo estas líneas. Igual que están todos esos autónomos, hosteleros, propietarios de gimnasios... que no saben si van a poder sobrevivir si ni siquiera les dejan trabajar y su Ayuntamiento tarda nada menos que nueve meses en resolver una ayuda. H

*Portavoz del PP en el Ayuntamiento de Castellón