La Audiencia de Valencia condena a 5 años de prisión por abusos sexuales continuados cometidos en 2016 y 2017 a Luis Eduardo Ramírez, entonces marido de Mónica Oltra. Líder de Compromis, vicepresidenta del Consell y consellera de Igualdad.

Los abusos se cometieron sobre una niña de 14 años ingresada en un centro de la Conselleria de Mónica Oltra a la que el tribunal le reprocha varias cosas. Que nunca la creyeran y se la tratara como acusada, incluso la llevaron a la sala esposada. Realizar una instrucción de manera paralela con un informe a posteriori que muestra un marcado sesgo contra la niña en cuestión, de la que dice que es «problemática, mentirosa y violenta».

La hostilidad y absoluta falta de empatía hacia la víctima de quienes estaban llamados a protegerla. Aprecia favor hacia el acusado al ocultar sus apellidos o permitirle que redactara un protocolo en su defensa. La Conselleria se encamina más a destruir la acusación que a proteger a la víctima. Que nunca acudieran a la Fiscalía de menores y que los hechos se conocieran porque la niña se lo contó a la Policía.

Comportamiento inaceptable de la consellera, que en un caso similar en Segorbe no dudó en dar datos y en cerrar la residencia, a pesar de que el implicado fue declarado inocente.

El colmo de la contradicción es que en este caso no se creyeron a la mujer y sí al varón, en contra de todas las teorías que dice defender. Y el tripartito valenciano en lugar de reprochárselo, le dio un gran aplauso haciendo gala de mucho sectarismo y poca justicia y vergüenza.

La señora Oltra debería dimitir o ser cesada de inmediato.

Notario y doctor en Derecho