A finales de esta semana aprobaremos definitivamente el presupuesto del Patronato Municipal de Fiestas para este 2021. Por segundo año consecutivo, no hemos podido celebrar las fiestas de la Magdalena, obedeciendo a un criterio de responsabilidad y máxima prudencia y atendiendo a la situación epidemiológica por la que atravesaba esta ciudad en enero, cuando se tomó la decisión consensuada entre el Ayuntamiento y el món de la festa, de no celebrar las fiestas fundacionales en marzo. Desde estas líneas, aprovecho para agradecer de nuevo la comprensión de los festeros y de la ciudadanía en general, al entender que la prioridad era evitar situaciones que pudieran generar concentraciones de personas y propagación del virus.

Así, y atendiendo a la realidad, el presupuesto anual de fiestas se ha visto reducido y se ha adaptado al contexto covid-19, de forma que el dinero que se reduce de fiestas irá destinado a políticas de bienestar social para paliar los efectos de la covid-19 en los sectores más vulnerables.

Este gobierno municipal progresista tiene claras cuáles son sus prioridades. Desde el momento que cruzamos los soportales del Ayuntamiento, los socialistas tuvimos claro que las personas son primero; pero parece que el PP no acaba de entenderlo. La semana pasada recibimos enmiendas al presupuesto del Patronato de Fiestas por parte del PP, que pedían que destináramos más dinero a los entes festeros, en un ejercicio de demagogia al cual nos tiene acostumbrados la derecha. Enmiendan el presupuesto en este sentido, pese a que las nuevas cuentas ya siguen manteniendo una línea de subvenciones a los colectivos festeros, adaptada a las circunstancias actuales. El món de la festa seguirá teniendo ayudas, así lo contemplamos en el presupuesto. La demagogia del PP tiene las patas muy cortas.

Concejal de Fiestas del Ayuntamiento de Castelló