El presidente del Gobierno de España, el inefable Pedro Sánchez, ha dado un nuevo ejemplo de mezquindad política al avalar los indultos para los políticos catalanes presos por poner en jaque la soberanía y la dignidad de todo el país. Intolerable. Y para justificar tan deleznable decisión, Sánchez dice que hay que dejar a un lado el rencor y el revanchismo para construir una sociedad en concordia… Y lo dice, precisamente él, que con sus socios de Unidas Podemos, han despertado todos los rencores y fantasmas de 1936… ¡Menuda jeta!

El señor Sánchez tiene el dudoso honor de ser el peor presidente de la historia democrática de España, superando con creces a su antecesor, el también inefable José Luis Rodríguez Zapatero, representante ante el mundo de los dictadores caribeños que no respetan los derechos humanos. Ese es todo su bagaje político. Ese y un montón de discursos llenos de mentiras y palabras huecas que solo producen crispación.

Por eso, el resto de ciudadanos, los que respetamos la Ley y creemos en la justicia, tenemos la obligación de plantarle cara, decirle muy fuerte que España no está en venta y que todos estamos obligados a respetar una Constitución que garantiza las obligaciones y los derechos de todos y cada uno de nosotros. Debemos hacer bandera de nuestra indignación y no podemos cruzarnos de brazos. Y para mostrar al Gobierno del PSOE el verdadero sentir de los españoles, el PP de Castellón ha iniciado en la provincia una campaña de recogida de firmas que permita canalizar el malestar ciudadano frente a la infamia de los indultos anunciados por Sánchez, una acción que ataca directamente a nuestra convivencia.

Además de la campaña de recogida de apoyos ciudadanos contra este sometimiento del estado de derecho que pretende el Gobierno, desde el PP se realizarán otras iniciativas en todas las instituciones que, en forma de moción, por ejemplo, exijan un pronunciamiento público de todos los grupos políticos en defensa de la verdadera convivencia y la concordia. Al PSOE no le importa vender el futuro del país cediendo ante los caprichos de los independentistas condenados para garantizar la continuidad de Sánchez en el sillón presidencial. Pero deben saber que España no está en venta.

Alcalde de Sant Joan de Moró y diputado provincial