Desde el año 2008 se han perdido más de 100.000 empleos en el sector bancario y el desmantelamiento de más de 20.000 oficinas en España. La provincia de Castellón no ha sido ajena a esta pandemia del sector bancario y en la actualidad de los tres expedientes de regulación de empleo más importantes del sector la afectación en la provincia, al igual que en el resto del territorio español, es alta, con 33 salidas sobre una plantilla de 175 empleados en Banco Santander, una propuesta de 26 bajas sobre 150 trabajadores y trabajadoras en BBVA y 161 despidos como consecuencia de la fusión de Caixabank y Bankia.
Si bien es cierto que la digitalización y las fusiones han provocado un excedente de personal, no es menos cierto que las cargas de trabajo a las que están sometidos los trabajadores y trabajadoras del sector con prolongaciones de jornada interminables y la exclusión financiera de habitantes de muchas zonas rurales por el cierre de oficinas indican una desproporcionalidad manifiesta en el elevado número de personas afectadas por estos ERE de la banca, despreciando el esfuerzo de las plantillas para conseguir los millonarios beneficios obtenidos por estas empresas del sector bancario, imponiendo a los afectados, en muchas ocasiones, una voluntariedad forzosa a estas salidas que encubren en realidad despidos forzosos bajo presión y amenazas.
Por si fuera poco, se une a estos ERE la práctica, por parte de la banca, de no cubrir las jubilaciones que se van produciendo, los acuerdos individuales de salidas de trabajadores y trabajadoras de mayor edad, la transformación de oficinas en agencias utilizando a trabajadores y trabajadoras de la plantilla que causan baja pasando a ser trabajadores autónomos o actuaciones más detestables como los despidos disciplinarios por baja productividad que nos han llevado a contabilizar más de 2.000 despidos dentro del sector en el año 2020 y ser ya el país de Europa con un menor número de empleados por oficina según datos del Banco Central Europeo.
Creo que deberíamos de reflexionar todos y todas sobre un sector capaz de destruir en una sola empresa más de 8.000 puestos de trabajo y a la vez y sin ningún tipo de miramiento declarar miles de millones de beneficios o triplicar el, ya de por sí, generoso sueldo de su presidente.
*Secretario General Federación Servicios CCOO Castellón
