Al PSOE parece que no le gusta trabajar por mejorar la vida de los ciudadanos. Por eso la política económica del Gobierno de Sánchez parece diseñada para hacer la vida imposible a los empresarios, ya sean grandes o pequeños; y a los autónomos.

De otra manera no se entiende que la hasta ahora presidenta del Senado, la socialista Pilar Llop, que con la remodelación del Gobierno de Sánchez se pone al frente del Ministerio de Justicia, haya tenido la desvergüenza de anular de manera unilateral la propuesta del PP, que fue aprobada por mayoría, de reducir el IVA para el sector de peluquería, barbería y estética del 21% al 10%. Una rebaja que hubiera salvado a muchos negocios y, con ellos, muchos puestos de trabajo… La decisión de Llop ha sido, sin lugar a dudas, una decisión absolutamente antidemocrática, que claramente contraviene el reglamento y que, desde el PP, vamos a combatir en todas las instancias con el fin de defender los legítimos derechos de los profesionales del sector.

El Partido Popular está al lado del sector de las peluquerías y vamos a trabajar para garantizar la supervivencia de unas empresas duramente golpeadas por la crisis del covid-19 y la falta de sensibilidad del PSOE a la hora de adoptar medidas de carácter económico que ayuden a garantizar su supervivencia. Por eso hemos presentado en la Diputación una moción para instar al Gobierno de España a no vetar y apoyar la proposición de ley impulsada por el Grupo Parlamentario Popular para reducir el IVA. Y esa misma moción la vamos a presentar en las 135 localidades de nuestra provincia.

El sector de peluquería, barbería y estética es uno de los sectores que peor lo están pasando para levantar, día tras día, las persianas de sus establecimientos. Y lo está pasando muy mal no solo por la elevadísima reducción de la actividad profesional debido a las limitaciones de una pandemia tan inesperada como mal gestionada; sino también por otros muchos elementos como la alta presión fiscal, el escandaloso encarecimiento de la energía eléctrica, el incremento de la cuota de autónomos… sin olvidar el crecimiento de la economía sumergida en este campo y que se estima que puede alcanzar hasta un 20% de la facturación total del sector. Y, mientras, el Gobierno de Sánchez sigue cruzado de brazos. Y Ximo Puig, en la Generalitat, mira hacia otro lado.

Las cifras hablan por sí solas: con la pandemia han desaparecido en la provincia de Castellón 225 empresas hasta reducir el número de peluquerías en 1.100 que, en su mayoría, son micropymes.

Los servicios de peluquería no son un lujo y, por tanto, no pueden cobrar un IVA del 21%. La principal prueba es que, durante la pandemia, en pleno Estado de Alarma, Pedro Sánchez incluyó al sector entre las «actividades esenciales». Sin embargo, a la hora de aplicar la fiscalidad, el gobierno de izquierdas sigue exprimiendo el bolsillo de los españoles y asfixiando a los pequeños emprendedores, en su mayoría pymes y autónomos, que no necesitan más problemas, sino ayudas urgentes y efectivas.

Y lo más dramático es que el problema tiene fácil solución y solo depende de la voluntad y el talante de Pedro Sánchez. Pero todos sabemos lo que de verdad le preocupa a Pedro Sánchez…

Alcaldesa de Vall d’Alba. Diputada provincial. Presidenta provincial del PP de Castellón