Vacunar, vacunar y vacunar. Lo dijimos y lo cumplimos, pero la derecha y la ultraderecha lo olvidan. Lo suyo es seguir crispando con el único afán de tumbar al Gobierno como sea, aun a costa de dividir a la sociedad y dañar la imagen de España.

Lo anunció el entonces ministro de Sanidad, Salvador Illa: en diciembre de 2020 se empezaría a vacunar. Se rieron, pero se cumplió. Lo anunció el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez: el 70% de la población estará vacunada al acabar el verano. Se volverá a cumplir, porque cada día se baten récords de pinchazos. Estamos casi en el 55% de la población, con casi 26 millones de personas con una dosis. Y estos días llegaremos al umbral del 40% de población con pauta completa.

Los agoreros salvapatrias dijeron que el plan de Recuperación será un fracaso, pero en las últimas semanas hemos visto el respaldo que ha recibido España de la Comisión Europea, como expresó su presidenta en visita a Madrid. Un Plan que prevé la llegada de 140.000 millones de euros, 72.000 millones en transferencias directas que no tendrán que ser devueltas. Un sí que se ha hecho realidad ya en el Consejo de Ministras y Ministros del 13 de julio, en el que se destinaron los primeros 9.000 millones de euros. Mientras, Pablo Casado y el PP enviaron informes a la UE para que no llegasen los fondos.

Este es un gobierno de coalición progresista legal y legítimo que ha gestionado una pandemia mundial, como nunca había pasado, pensando en las personas y sin dejar a nadie atrás. Un gobierno con un presidente cuya prioridad ha sido proteger el empleo y desplegar un escudo social como nunca antes en nuestro país. El primer ejemplo, los 16.000 millones de euros destinados a las Comunidades Autónomas (sin reembolso) para afrontar la crisis sanitaria, económica y social. Un gobierno que con los ERTE ha protegido a más de seis millones y medio de trabajadores, con 13.384 millones de euros. Los ERTE se crearon al amparo de la ley 35/2010 aprobada con José Luis Rodríguez Zapatero, pero el PP votó en contra de esta medida.

Un gobierno que ha aprobado 32 leyes en 60 semanas hábiles (una cada dos semanas), 80 normas de rango legal, con reales decretos (una cada cinco días). Un gobierno que ha creado un Plan de Empleo juvenil con 4.000 millones de euros que puede beneficiar a siete millones de personas de 16 a 29 años. Un gobierno con un presidente que es el que ha realizado más comparecencias en el Congreso y en el Senado. En 18 meses y durante la pandemia: investidura, nueve Estados de alarma, cuatro Consejos de la UE, una moción de censura de la ultraderecha, 111 preguntas orales y más de veinte Conferencias de Presidentes/as autonómicos.

Un gobierno con el que el paro ha bajado en 166.911 personas y la Seguridad Social registra 202.857 afiliados más que en el último mes. Y la Comunidad Valenciana ha recuperado el nivel de empleo previo a la pandemia.

Un gobierno que pese a gestionar los efectos devastadores del covid ha aprobado leyes como: Educación, Eutanasia, Ley de Infancia y Adolescencia, Cambio Climático, los Presupuestos Generales del Estado, el ingreso mínimo vital o la subida del salario mínimo interprofesional. Un gobierno que gobierna, como lo hará el ejecutivo remodelado, y que pacta: 10 acuerdos con sindicatos y patronal en 18 meses. El diálogo social solo existe si gobierna la izquierda. No lo olvidéis. Y España no se rompe.

Un gobierno con un grupo mayoritario, el Grupo Parlamentario Socialista, que desde el inicio de legislatura ha presentado más de 200 iniciativas en plenos y comisiones, con 35 proposiciones y proyectos de ley aprobados en el Congreso y 49 reales decretos-leyes convalidados. Y Presupuestos aprobados.

Las y los españoles quieren soluciones y no conflictos, concordia y no discordia; vacunas, empleos, vivienda y no insultos, ni mesas petitorias ni recursos de inconstitucionalidad. Pactar en lugar de discutir de manera estéril. La política debe atenerse a la ley, pero lo que hace la derecha y la ultraderecha es manipular la ley para ocultar que no tienen propuestas y solo saben vivir del enfrentamiento. Este es un fin de curso, sin dejar de trabajar, en el que se puede decir, con realismo y sin triunfalismos, que el Gobierno progresa adecuadamente. Aprobado y con nota.

Diputada PSOE por Castellón. Portavoz Adjunta GPS. Secretaria Ejecutiva contra la Violencia de Género