En el PP queremos demostrar que hay una alternativa a los gobiernos de izquierdas, que no todo consiste en subir impuestos para mantener las políticas ideológicas y que los problemas de las personas deben estar siempre por delante.
Hemos presentado nuestra propuesta fiscal para la Comunitat Valenciana de la mano de Carlos Mazón. Basada en rebajar o eliminar todos los impuestos autonómicos, entre ellos, la supresión del impuesto de sucesiones que tantas herencias ha hecho perder. Rebajas que afectan a las clases medias y bajas, que solemos ser los que más sufrimos las subidas de impuestos de la izquierda.
En Castellón hemos propuesto una bajada de 9.718.000 euros. Creemos que otra forma de gestionar es posible. Es mejor que el dinero esté en el bolsillo de cada uno y que lo invierta en lo que considere. Una propuesta que incluye una rebaja del IBI en 5,8 millones de euros, para dejar de ser la segunda ciudad más cara de España, empatados con Barcelona.
En un momento en el que sube la luz, el gas, el combustible, la lista de la compra y hasta se va a volver a pagar por los peajes en autopistas y autovías, el PSOE, Compromís y Podemos recaudará, este año, 816.000 euros más en impuestos en Castellón.
Un gobierno municipal debe hacer lo imposible por ayudar a sus ciudadanos. Más si cabe, cuando hay margen porque al tripartito le sobraron 35 millones el año pasado, algo que se repetirá este año al entrar en vigor los presupuestos en septiembre.
Durante esta legislatura del tripartito ha subido el paro, la presión fiscal, el número de asesores y sus sueldos un 50%. Es el gobierno más caro de la historia de Castellón y el que menos aporta a los ciudadanos.
Secretario general y portavoz adjunto PPCS
