En las elecciones de 2019, los vecinos y vecinas de Benicàssim colocaron al Partido Popular como primera fuerza en el municipio y al Partido Socialista como líder de la oposición. El grupo municipal socialista ha ejercido el encargo democrático con dedicación, lealtad y priorizando el bien del municipio, siempre por delante de cualquier otra cuestión. Desde el PSPV de Benicàssim hemos comprendido que en estos tiempos preelectorales no era momento de acometer una moción de censura al gobierno de Susana Marqués. Era tiempo de pactos y de priorizar el bien de la población, avanzando en la gestión de proyectos estratégicos para nuestro municipio, sin ahondar en la inestabilidad política vivida hasta el momento.
Estado permanente de parálisis política
El PP no ha sabido realizar su labor de gobierno. Desde 2019, la batalla partidista entre las alcaldesas de PP i Ciudadanos ha acabado con una ruptura escandalosa que ha sumido Benicàssim en una crisis política que ha frenado la recuperación del municipio y la protección de las familias. Se han quedado contratos de servicios sin adjudicar, el centro de mayores sin abrir, el decaimiento de la cultura y el deficiente estado de limpieza de calles y jardines. Lamentamos que Benicàssim haya estado sumida en un estado permanente de parálisis política durante toda la legislatura.
Ante tal desbarajuste, desde el PSPV planteamos el diálogo como vía de solución a la situación política de bloqueo que vive nuestra población, aportando propuestas y controlando la gestión municipal. Actuaremos desde la lealtad y desde la responsabilidad, asumiendo un compromiso con el conjunto de la población. El PSPV se presenta como la única alternativa seria que garantice el futuro de Benicàssim.
Portavoz del PSPV de Benicàssim
