UJI Smart Campus

La creación de la Universitat Jaume I en 1991 supuso, desde el mismo momento de su aprobación en las Cortes Valencianas el 13 de febrero de ese año, el comienzo de los trabajos para la formulación del Plan Especial de la Universidad donde se definirían los ejes primordiales y los objetivos que iban a regir la construcción del campus de la nueva universidad.

La finalidad de esta planificación no solo era ordenar las actividades docentes e investigadoras organizadas en los tres ámbitos iniciales (jurídico-económico, humanístico-social y científico-técnico), también dejaba prevista una zona de expansión para futuras áreas docentes y/o investigadoras. Además, se definieron las tipologías de edificación de baja altura que integrarían departamentos, aularios y espacios polivalentes, incorporando zonas verdes y áreas ajardinadas en las proximidades de los edificios para favorecer la utilización de los espacios exteriores. Esta ordenación también contemplaba la dotación de un número suficiente de plazas de aparcamiento, pero, paralelamente, se favorecía la plantación de arbolado para contribuir a mantener el microclima de la zona y conteniendo la presencia de vehículos.

Desde la aprobación de este plan, la UJI ha venido desarrollando las inversiones necesarias para completar un campus que permita desempeñar tanto su función docente e investigadora como la formación en valores de la comunidad universitaria. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos de los sucesivos equipos de gobierno, las incertidumbres económicas han limitado la ejecución de muchas de estas actuaciones.

Bajo el liderazgo de la rectora Eva Alcón se ha dado un nuevo impulso al desarrollo de infraestructuras y nuevos equipamientos para consolidar el campus y, además, avanzar en la configuración de un verdadero Smart Campus. Con este objetivo, el Consejo Social y el Consejo de Gobierno aprobaron en 2019 una planificación de inversiones para el periodo 2019-2022 que permitieran adaptar el campus a las necesidades actuales y futuras de la Universidad.

La ejecución de este plan ha permitido concluir equipamientos estratégicos como la Facultad de Ciencias de la Salud, iniciar obras para la dotación de nuevos espacios de investigación (CIRTESU y Edificio de Investigación II) y dar un impulso a la sostenibilidad y habitabilidad del campus, dotándolo de nuevos espacios peatonales y zonas verdes y de infraestructuras destinadas al ahorro energético.

La experiencia positiva de disponer de un instrumento de planificación de las actuaciones necesarias han aconsejado la elaboración de un nuevo plan para el periodo 2023-2026 que, siempre dentro de un marco de prudencia y condicionado a las disponibilidades económicas, permita llevar a cabo inversiones necesarias para la consolidación del campus y la realización de las actividades propias de la Universidad.

Este nuevo plan de inversiones propias de la UJI se articula en torno a cuatro ejes estratégicos que abarcan diferentes áreas para avanzar en las actividades de docencia e investigación y en la sostenibilidad del campus: adecuación y mejora de instalaciones docentes; consolidación, adecuación y mejora de infraestructuras de investigación e innovación; sostenibilidad ambiental y mejoras de eficiencia y de ahorro energético, y, finalmente, nuevas infraestructuras y equipamientos para mejora de los servicios.

Las actuaciones previstas en este plan pretenden crear un campus más sostenible, inteligente, tecnológico y habitable (UJI Smart Campus). Por ello, la construcción, mantenimiento y adecuación de las infraestructuras, edificios y demás espacios universitarios se basan en criterios sostenibles y en el empleo de las nuevas tecnologías, mediante metodologías que puedan transferirse a las ciudades, promoviendo el campus como un laboratorio para demostrar y aportar soluciones para unas ciudades más sostenibles (Urban-Lab).

Así, los proyectos del plan de inversiones 2023-26 atienden necesidades prioritarias y se despliegan en torno a diferentes áreas.

En el ámbito de la investigación, la docencia y la innovación, se proyecta la reparación, adecuación y mejora de espacios para garantizar su adaptación a las necesidades de la comunidad universitaria y demás usuarios de las instalaciones.

Respecto al medio ambiente y naturaleza, se apuesta por la renaturalización de los espacios del campus para favorecer la biodiversidad y generación de puntos de interrelación al aire libre (zonas para docencia en exterior, descanso, estudio, actividades culturales, etcétera). El Jardí del Temps corresponde a este compromiso y, además, ha permitido la reordenación del tránsito de vehículos en el interior del campus, potenciando al máximo las circulaciones peatonales en el interior del campus, así como el uso de la bicicleta.

En cuanto a la energía y agua, se prevén acciones para la reducción de la demanda energética del campus, incremento del uso de energías renovables impulsando nuevos parques solares fotovoltaicos planificados y acciones para la reducción de la demanda de agua. También se mejorará la eficiencia energética mediante la renovación de equipos de climatización y mejoras en los sistemas de gestión para reducción de los consumos.

La movilidad sostenible es otro eje de actuación y por ello se proyecta la implantación de infraestructuras que impulsen el transporte sostenible, la incentivación del uso de bicicletas mediante servicio de préstamo de larga duración y la ampliación de la red de puntos de recarga en el campus para vehículos eléctricos e híbridos.

Por último, en el ámbito de las TIC, se avanza en la monitorización de magnitudes de interés para el desarrollo del campus y su sostenibilidad. Por ello, se ampliará el uso de las tecnologías en los sistemas de gestión y control centralizado de instalaciones de los edificios, así como la instalación de sistemas de sensorización que permitan una gestión centralizada eficiente y una explotación de la información.

En los próximos cuatro años el campus experimentará una importante consolidación, tanto en infraestructuras, como en habitabilidad y sostenibilidad imprescindibles para combatir la crisis energética y climática. El compromiso de la UJI con los Objetivos de Desarrollo Sostenible para hacer una Universidad más igualitaria, inclusiva y sostenible se configuran como ejes transversales que guían todas las actuaciones de este plan de inversiones.

*Vicerrector de Infraestructuras y Sostenibilidad

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