Una industria al borde del abismo

Me siento profundamente triste. Los castellonenses vemos como nuestro clúster cerámico comienza a desmantelarse sin que el Gobierno de Pedro Sánchez mueva ni un solo dedo. El PSOE demuestra cada día su incapacidad para gestionar un problema como el que están sufriendo nuestras empresas cerámicas, y que puede acabar con una industria que no solo es la principal fuente de riqueza y de puestos de trabajo de nuestra provincia, sino que, a base de esfuerzo y superación, se ha convertido en la mejor tarjeta de presentación de nuestra provincia en el mundo entero como claro referente de calidad e innovación.

Mientras que las empresas cerámicas de Italia cuentan con el apoyo de su Gobierno para intentar mantener su competitividad en el mercado global a pesar del desorbitado incremento de los costes energéticos y de las materias primas, las firmas de Castellón tienen que conformarse con unas ayudas que, según las patronales, son claramente insuficientes. Vamos, que realmente no sirven para nada. Puras migajas.

Estamos perdiendo la batalla. El PSOE está empujando a nuestras empresas cerámicas al borde del abismo. La situación es grave y dolorosa, y afecta a toda nuestra provincia, porque muchos pueblos castellonenses viven por y para la cerámica, que es mucho mas que un negocio: la cerámica también forma parte de nuestra cultura y de nuestras tradiciones.

No quiero ser pesimista, pero tengo la impresión de que el Gobierno de Pedro Sánchez ya está haciendo tarde. ¿Para qué vino a Castellón la vicepresidenta y ministra de Asuntos Económicos, la inefable Nadia Calviño? Llegó y se marchó sin aportar nada. Debería estar aburrida en Madrid, porque aquí vino realmente para nada… Y es que mientras nuestra principal fuente económica, la industria cerámica, se desangra días tras día; ella, la ministra progresista, vino en nombre de todo el gobierno socialista, a sonreír a los flashes fotográficos… o sea, para nada.

Menos postureo y más trabajo. Más talento y más talante para devolver la esperanza a una industria básica e imprescindible para el presente y el futuro de la provincia. Cerca de 13.000 trabajadores están afectados por los ERTE y la destrucción de empleo se acerca al medio millar. Insoportable.

Alcalde de Sant Joan de Moró y diputado provincial

Suscríbete para seguir leyendo