El laberinto

Esta semana he tenido la oportunidad de visitar, invitado por sus impulsores y propietarios, el laberinto vegetal que abrirá sus puertas en Peñíscola, antes de la Semana Santa, previamente al inicio de la temporada turística en nuestra localidad.

Un proyecto gestado a fuego lento desde 2018, iniciaba la plantación del trazado verde y su diseño en 2020, que hoy es ya una realidad que impresiona e impresionará a cualquiera que vaya a visitarlo en el futuro.

Es ya el laberinto multicursal y de planta fija más grande de España y tercero de Europa, un atractivo que se suma a la extraordinaria oferta complementaria que ofrece Peñíscola a sus turistas y visitantes.

La noticia de la conversión en laberinto de estos más de 7.000 metros cuadrados de parcela ha despertado mucha expectación y honestamente lo merece, pues la familia que ha gestionado el vivero de Peñisverd a lo largo de décadas ha invertido mucho más que recursos económicos en este nuevo proyecto, ha invertido sus ganas, su ilusión y muchos esfuerzos en que hoy sea ya una realidad que, muy pronto, abrirá su experiencia al público.

Capital privado

Valoramos mucho el esfuerzo de esta iniciativa de capital privado por poner en valor las actividades al aire libre, la promoción de los espacios verdes y la apuesta por los recursos turísticos sostenibles, la apuesta --en definitiva-- por Peñíscola y su futuro. En los últimos años hemos podido comprobar que, no solo se ha invertido capital privado en la renovación, modernización y ampliación de las plazas hoteleras de nuestra ciudad, sino que proyectos como el Museo de la Magia del mago Yunke o este mismo laberinto han llegado para ampliar nuestras posibilidades, sembrando en terreno abonado --nunca mejor dicho--, la semilla de propuestas turísticas que germinará con éxito seguro.

Las administraciones y el sector tenemos la obligación de aprovechar y aplaudir este tipo de iniciativas que se suman a nuestra apuesta estratégica por la sostenibilidad turística, buscando nuevos productos que sean capaces de sostener la demanda turística más allá de los meses de la temporada estival.

En ello estamos, juntos, los brazos públicos y privados, para avanzar conjuntamente y continuar creciendo.

Tenéis una visita pendiente a Peñíscola, ¡no os la perdáis!

Alcalde de Peñíscola

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