carta del obispo

Semana Santa

Casimiro López Llorente

Casimiro López Llorente

Hoy comienza la Semana Santa, la semana más importante del año para todo cristiano y para toda la comunidad cristiana. Es santa porque ha sido santificada por la pasión, muerte y resurrección del Señor, que celebramos estos días. Estos acontecimientos son la prueba definitiva del amor de Dios a los hombres, manifestado en la entrega total de su Hijo Jesús hasta la muerte en la Cruz para el perdón de nuestros pecados y para hacernos partícipes de la Vida misma de Dios.

El Domingo de Ramos es un día de gloria por la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén y un día, a la vez, en el que la liturgia nos anuncia ya su pasión y muerte. La palma del triunfo y la cruz de la pasión no son una paradoja. Son, más bien, el centro del misterio que creemos, proclamamos y actualizamos en la Semana Santa. «Sabiendo que había llegado su hora de pasar de este mundo al Padre, habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el extremo» (Jn 13, 1).

Los días siguientes conducen hasta el Triduo Pascual: desde el Jueves Santo al Domingo de Resurrección. El Jueves Santo se centra en el amor; Jesús celebra la cena pascual con sus discípulos y anticipando su entrega por amor en la cruz. El Viernes Santo se centra en la pasión y muerte de Jesús en la Cruz, la expresión suprema del amor entregado hasta el final. Y, después del silencio del Sábado, llega la Vigilia Pascual y el Domingo de Pascua de resurrección, día de triunfo, de acción de gracias y de alegría.

El Triduo Pascual culmina en la Vigilia Pascual, la celebración litúrgica más importante del año. La Resurrección de Jesús es la respuesta del Padre Dios a la muerte entregada de su Hijo.

También nosotros somos destinatarios de la pasión, muerte y resurrección de Jesús. Jesús Nazareno padece y muere por nosotros y por nuestros pecados: y resucitando, vence la muerte y nos abre el camino a la vida eterna, a la Vida misma de Dios, fuente y motor de vida y fraternidad.

*Obispo de Segorbe-Castellón

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