La rueda

Personalidad tipo A

carlos Hidalgo

La personalidad es un conjunto de características que influyen en la forma en que pensamos, sentimos y nos comportamos. Entre las diversas categorizaciones, uno de los modelos más conocidos es el de Personalidad Tipo A, B, C y D propuesto en los años 50. Si el patrón tipo B describe a las personas reflexivas y creativas, el tipo C incluye como rasgos definitorios la represión emocional y la desesperanza, y el tipo D describe a personas que combinan la inhibición social y la preocupación, el tipo A caracteriza a sujetos impacientes, competitivos, agresivos, codiciosos y con un sentido de urgencia constante.

Las personas con este tipo de personalidad están siempre buscando alcanzar el éxito en todas las áreas de su vida, teniendo una elevada necesidad de control sobre su entorno y su tiempo. Existen datos científicos que avalan que este estilo de vida estresante, propenso a la hostilidad y la ira, correlaciona con un aumento del riesgo de enfermedades cardiovasculares, incluyendo los infartos. Esto es debido a que tienden a experimentar niveles más altos de estrés crónico por su naturaleza impulsiva, orientada a objetivos. Y es que mantener una tensión prolongada en el tiempo tiene un efecto negativo en el sistema cardiovascular, aumentando la presión arterial, elevando el nivel de colesterol y favoreciendo la formación de placas en las arterias, lo que incrementa el riesgo de infarto. Si bien la personalidad tipo A puede ser una característica innata en algunas personas, es posible realizar cambios de comportamiento para reducir el riesgo de enfermedades cardiacas.

Aprender técnicas efectivas para manejar el estrés es crucial. Así, la meditación, la respiración profunda, el ejercicio regular y la práctica de mindfulness suele ser útil. Además, convendría aprender a distinguir entre lo que es urgente y lo que es importante, estableciendo metas realistas y organizando el tiempo de manera efectiva, evitando así la sensación constante de urgencia. Casi todas las cosas vuelven a funcionar si las desenchufas unos minutos… incluso uno mismo.

*Psicólogo clínico

(carloshidalgo.es)

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents