Querid@ lector/a, estos días las noticias políticas tienen que ver con la decisión de Feijóo (candidato designado por el rey para intentar formar gobierno) de empezar las consultas con los portavoces de los grupos parlamentarios. Encuentros en los que Feijóo buscará el respaldo necesario para su candidatura y políticas. La verdad es que no quiero sentenciar de una forma categórica porque en la vida todo es posible, pero en la medida en que Feijóo no gana apoyos, todo indica que lo previsible es ver a P. Sánchez de presidente o ir a una repetición de elecciones.
En cualquier caso, y por lo que se observa en los medios, este proceso de contactos y propuestas está apareciendo como un acto de hipocresía y desvergüenza. Por cierto, pienso que estos calificativos, aunque duros, son adecuados a un proceso sin sentido, fruto de la desesperación y que denuncia la falta de proyecto. O dicho de otra forma: ¿cómo le pides a P. Sánchez y al PSOE que respalde tu candidatura a la presidencia después de hacer una sucia campaña con el único objetivo de acabar con el sanchismo y en la que has llegado hasta apelar al transfuguismo de los diputados socialistas? ¿Cómo le pides a P. Sánchez y al PSOE a que firme seis pactos de Estado cuando el Constitucional, el del poder judicial, llevas miles de días sin cumplir? ¿Cómo les pides a los nacionalistas que te voten a favor o se abstengan, cuando los has acusado de rompepatrias y, encima, tu socio preferente, Vox, les anuncia que va a intentar ilegalizarlos? ¿Cómo quieres gobernar cuando Abascal, el que influye en tu política, propone una involución constitucional, niega objetivos europeos como la lucha contra el cambio climático y la igualdad de la mujer…? En definitiva, Feijóo y los de su aparato saben que su fallida estrategia y su alianza política con Vox los han dejado en una soledad poco fecunda. Pero esconden un análisis realista y su fracaso porque los debilita internamente y pueden perder hasta el liderazgo del Partido Popular. De momento ya tienen contestación.
Analista político
