De dichos y hechos

De poco sirve la teoría si no hay hechos que la acompañen. Porque las palabras se las lleva el viento. En Borriol ha ocurrido algo parecido a aquella fábula en la que el pastor se quedó sin ovejas después de anunciar y anunciar la llegada del lobo. Hoy arrastramos los dichos de un partido, Compromís, que sigue sin mostrar los hechos. Nos contaron que iban a comprar un suelo, el del futuro instituto, y que sobre él nuestros hijos tendrían un centro definitivo. Nada.

Han pasado seis años y once meses. Un tiempo más que holgado para superar cualquier imprevisto técnico. Por eso hoy nos duele tanto que haya quien, al frente de la alcaldía, trate todavía de justificar lo injustificable. Y lo haga sin sonrojo.

Borriol no lo merece. Ni las familias, ni los alumnos, ni tampoco los docentes. Por ellos, por los que están y por los que vendrán, porque hace siete años que se anunció algo que a día de hoy todavía sigue sin cumplirse, merecemos avanzar.

Nosotros estaremos al lado de este equipo de gobierno para que cumpla la palabra dada. Y lo haremos por nuestro pueblo. Haciendo realidad aquello que decimos. Porque para nosotros la palabra dada lo vale todo.

Hoy pedimos avanzar en la compra del suelo del instituto con el ritmo con el que nuestra Generalitat valenciana construye el centro de día que, tras superar zancadillas, crece imparable. Una instalación que bien merecen nuestros mayores y a la que el Consell destina más de 952.000 euros. Los dichos que el PP sí convierte en hechos.