Más ignominia

Resulta preceptivo admitir el talento, pocas veces acompañado de nobles principios, desarrollado con éxito para sus particulares intereses (mantener a Pedro en la poltrona como sea) de la maquinaria Ferraz&La Moncloa Pictures. Desde los ministros hasta el último botones del aparato recitan al unísono los argumentarios elaborados con precisión semántica, en proverbial demostración de aplicada maestría goebbeliana. Enfrente, una oposición desmayada que gana elecciones y encuestas sin poder gobernar.

La cesión de la inmigración y control de fronteras a Cataluña, pactado con Puigdemont a cambio de sus siete votos, es uno de esos indeseables ardides de Sánchez contra el Reino de España vendido por el equipo de recitadores como algo positivo para el general de españoles. Pero tanta falacia ya no cuela y hasta el colega Monrosi, pluma destacada del órgano sanchista dirigido por el simpático Escolar, ha sido claro: «Que no se rían de nosotros», señalando el fracaso de gobernabilidad.

"Bochorno"

La última prueba de miserable entreguismo ha sido calificada por García Page, que sí gana en las urnas: «No fuimos a las elecciones con este planteamiento, fuimos con planteamiento contrario: cualquiera que se considere de izquierdas no puede, ni mucho menos, tragar con una realidad que es, cuanto menos, de un racismo evidente y de exclusiones identitarias». Y confiesa: «Como socialista siento mucho bochorno». Habrá más ignominia, podemos llegar a ver la foto de Pedro con Puigdemont en Suiza, si el delincuente fugado lo exige.

Periodista y escritor