La protección solar concita tanto interés como dudas durante el periodo vacacional. Máxime en verano. Saber qué crema es la adecuada o cuál es el método apropiado de aplicación son conocimientos enmarañados por un sinfín de mensajes contradictorios y publicidad engañosa, que confunde al público y le transmite mentiras muy riesgosas para la salud de su piel.

Comencemos por los tipos de fotoprotectores. Existen los químicos, los físicos y los mixtos. Los químicos succionan la radiación solar y la convierten en energía inofensiva para la dermis; los físicos (las "pantallas minerales") operan como un muro físico que dispersa y refleja los rayos solares; son también los menos estéticos, porque son opacos y no pueden absorberse. Los mixtos son una mezcla de los anteriores.

Hecha ya la distinción entre protectores, pasemos a las normas para cuidar tu piel en verano.

1.El factor de protección solar o FPS

El FPS es un índice que incluyen los fotoprotectores y que mide su duración. El número del FPS indica la correlación entre el límite de exposición solar sin consecuencias usando fotoprotector y el límite sin usarlo. Es decir, una crema solar con FPS 30 significa que la quemadura o lesión cutánea tarda 30 veces más en aparecer que si no se aplicase. La empresa cosmética Nivea indica que el FPS permite averiguar cuántos minutos podemos protegernos del sol.

Para descubrirlo, debemos multiplicar el FPS de nuestro fotoprotector por nuestro límite natural de exposición solar —una cifra que varía según el individuo, pero que es de mínimo 10 minutos—. Así pues, un FPS 50 por 10 minutos equivaldrían a un máximo de 500 minutos diarios blindado, siempre que el fotoprotector se aplique en cantidades y frecuencias correctas. Ante la duda de qué crema solar emplear, Nivea facilita una imagen aclaratoria.

Los fototipos de piel. Nivea

Respecto a las cremas solares anunciadas como "pantalla total", se desaconseja su empleo. No existe ningún indicio de que la protección completa sea posible, ni de que sean más eficaces los FPS de más de 50 que los de 50. Otro mito es que superponer capas de crema prolongue la barrera solar.

2.Resistencia al agua

Algunas cremas solares se publicitan como resistentes al agua o water resistant cuando mantienen su FPS tras dos inmersiones de 20 minutos; y como impermeables o waterproof cuando la conservan después de cuatro inmersiones. Pero omiten la duración de la crema en el cuerpo tras mojarse. Y esa es la información relevante, porque nos permite saber cuándo volver a usar el producto.

3.Cómo aplicarse la crema

Los fotoprotectores deben utilizarse media hora antes de exponerse al sol. La crema debe suministrarse en cantidades suficientes y tiene que cubrir la piel; la aplicación debe repetirse cada dos horas o tras actividades susceptibles de eliminar el producto de la piel, como el ejercicio intenso, el contacto con el agua o secarse con una toalla. La FDA (Food and Drug Administration de EE.UU.) insiste en que los menores de 6 meses deben resguardarse del sol con ropa, no fotoprotectores.

4.¿Las cremas caducan?

Sí, lo hacen. Además, solo pueden reutilizarse si se han preservado en condiciones óptimas de temperatura; si no, han de desecharse.

5.Recomendaciones

La página web de Nivea dispone de un test para hallar la protección solar idónea.