Los carteles con la información imprescindible para iniciar una sesión de rayos uva, como la prohibición a menores de edad, sólo apareció en 13 centros y las explicaciones sobre tipos de piel en 12 de los 97 analizados. Los posibles riesgos de padecer daños en los ojos o aumento del riesgo de desarrollar tumores cutáneos estaban explicitados en dos instalaciones de bronceado, el mismo número de centros que informaban de que las personas embarazadas, con antecedentes familiares de cáncer de piel o que estén en tratamiento de antibióticos o antidepresivos no deben someterse a la sesión. Asimismo, sólo dos de los centros estudiados informaban sobre la obligatoriedad de limpiarse la piel de desodorantes, cosméticos y perfumes.
La OCU apeló a la responsabilidad de la Administración para vigilar por el cumplimiento de la ley y a la de los propios usuarios para estar informados sobre los riesgos de los rayos uva.
