Un hombre de 25 años, del que no se ha facilitado el nombre, fue detenido el viernes tras ser sorprendido en terrenos pertenecientes al castillo de Windsor, aunque no llegó a penetrar en la zona de seguridad. La reina Isabel II de Inglaterra estaba alojada en la propiedad en ese momento. El hombre, al parecer ebrio, fue detenido ante la sospecha de que quería robar, pero el sábado fue puesto en libertad. "En ningún momento se puso en riesgo la seguridad de la familia real", afirmó un portavoz policial.