La aparición de nuevos fármacos derivados de la talidomida abre una esperanza en el tratamiento del mieloma, un cáncer de sangre incurable que padecen unos 10.000 españoles, en especial entre los 60 y 70 años, y que es menos conocido que la leucemia o el linfoma.

Casi mil expertos de distintos países se reúnen en Salamanca en el IX Wokshop Internacional sobre Mieloma Múltiple, donde se expondrán 500 comunicaciones en encuentro bianual, para cuya celebración competían ciudades como Viena, Bruselas, Amsterdam y Atenas.

El doctor Jesús San Miguel explicó ayer que la talidomida y sus derivados, más útiles, menos tóxicos y de efectos derivados conocidos, aportan nuevas vías a los tratamientos conocidos hasta ahora: la quimioterapia tradicional y los trasplantes, con los que "se había llegado al tope".