La extracción del fuel del pecio del Prestige mediante bolsas no se llevará a cabo hasta la próxima primavera, informó ayer el vicepresidente de Repsol, Miguel Ángel Remón. El técnico explicó en Santiago --junto al vicepresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el presidente de la Xunta, Manuel Fraga-- los progresos en los distintos procedimientos que se desarrollan simultáneamente para alcanzar una solución definitiva a los restos del petrolero, hundidos a más de 3.500 metros de profundidad.

Las pruebas de la denominada extracción "por gravedad", que consiste en el llenado de grandes bolsas y su traslado a la costa, se llevarán a cabo este verano, como estaba previsto, pero Remón apuntó que no se encargará la construcción de los contenedores hasta conocer el resultado positivo de este test.

En ese caso, las bolsas se recibirían en diciembre, por lo que la extracción, que ocuparía unos tres meses, no se iniciaría hasta la primavera, por el mejor estado de la mar en esa época del año.

GRIETAS TAPONADAS

El vicepresidente del Gobierno explicó que, aunque no se ha recibido el informe por escrito, ya se conoce por los recientes trabajos del submarino Nautile que todas las grietas taponadas en su día "están bien" y, "en ningún caso, fluye más de una tonelada al día" del pecio del petrolero.