El nuevo planetoide descubierto por astrónomos norteamericanos, con la colaboración de telescopios españoles, podría pertenecer al cúmulo de Oort, en el cinturón de Kuiper, aunque éste es un extremo no confirmado porque se trata de una "suposición" astronómica para explicar fenómenos celestes.

El 2003BB12, llamado extraoficialmente Sedna, descubierto el 14 de noviembre por un equipo del Instituto de Tecnología de California (Caltech), capitaneado por Michael Brown, fue observado durante varios días por telescopios de Chile, Canarias, Arizona y Hawai (EEUU).

La confirmación de que existía la dio el Telescopio Espacial Spitzer, que indican que el planetoide no tiene más de 1.700 kilómetros de diámetro, es decir 500 kilómetros menos que Plutón. El planetoide está a más de 12.800 millones de kilómetros de la Tierra, es decir, tres veces más lejos que Plutón, y el más lejano al Sol.

Pertenecería al recientemente descubierto cinturón de Kuiper y parece ser la primera detección del "hipotetizado" cúmulo de Oort. La órbita extremadamente elíptica de Sedna no se había visto nunca por los astrónomos, pero parece que responde a la de los objetos que están en un cúmulo que rodea al Sol y que predijo hace ya 54 años el astrónomo alemán Jan Oort para explicar la existencia de ciertos cometas.

Esta hipotética nube o cúmulo de Oort se extiende a la mitad de la distancia más cercana, Próxima Centauri, que está a 40 billones de kilómetros, y que es el hábitat de pequeños objetos helados que ocasionalmente son empujados hacia el Sol y se convierten en cometas.