La representante de la Unión Europea en la conferencia antisida de Bangkok, Lieve Fransen, aseguró ayer que los países comunitarios aportan un 60% de los recursos económicos que recibe el Fondo Global de lucha contra el sida, la tuberculosis y la malaria, destinado a combatir la epidemia en los países pobres.

La UE dejó constancia de que los países comunitarios asumen "la parte esencial" de esas aportaciones financieras. La UE ha prometido destinar 900 millones de euros a ese fondo este año, frente a los 547 millones anunciados por EEUU. Al final, la aportación real de ambos bloques será inferior a lo prometido en la conferencia.