Querido Vladimir:

Viniste de lejos buscando nuevas oportunidades. Conociste muchos países y gentes para el final morir en nuestra tierra. Lo hiciste cumpliendo con tu deber, en acto de servicio.

Se ha ido un hombre bueno y afable con una voz peculiar.

¡¡Hasta siempre!!

Es el recordatorio y pequeño homenaje de tus compañeros de la vigilancia forestal.