Las grúas de asistencia en carretera de la provincia de Castellón volvieron ayer a su actividad normal después de estar durante tres días en huelga. Tras las reuniones celebradas durante la noche y la madrugada del viernes al sábado en Madrid, los representantes de los gruístas, tanto castellonenses como del resto del país, llegaron a un acuerdo con la patronal aseguradora UNESPA por el que dieron por finalizado el paro desde ayer.

La huelga fue secundada por el cien por cien de los gruistas de la Comunidad Valenciana, que han permanecido tres días sin prestar su servicio habitual en la asistencia en carretera. En la provincia, la reunión que se celebró el pasado lunes día 23 en la Cámara de Comercio fue el inicio del paro técnico. El cien por cien de los gruístas castellonenses decidieron aceptar el código deontólogico de comportamiento durante la huelga creado por CEPAS y con ello secundar la huelga iniciada en el País Vasco.

Según fuentes de la Delegación del Gobierno, la huelga afectó en su último día de vida a 85 vehículos en el conjunto de la Comunidad. En Castellón, fueron 34 los automóviles abandonados en arcenes y lugares colindantes con la vía, aunque responsables de las asociaciones de gruístas señalaron que nunca provocaron problemas en la circulación.