La multitud concentrada en la plaza del Pilar desde primeras horas de la mañana estalló en un unánime y gigantesco "¡Viva!" cuando poco antes de las 18.15 horas se dio a conocer en directo y desde París que Zaragoza acogerá la Exposición Universal del 2008.

"¡Hemos ganado, hemos ganado!". Personas de todas las edades gritaron vivas a la ciudad. Muchos lloraban de alegría. Otros se abrazaban a los desconocidos que tenían al lado, bajo la enorme pantalla de televisión que retransmitía el resultado de la votación.

"¡Estaba seguro de que ganaríamos!", exclamó Julio Manjón, técnico ya jubilado de la empresa Vítrex y que fue a la plaza para seguir en directo el gran acontecimiento. "La Expo dará a Zaragoza una fama mundial y permitirá que la ciudad recupere las orillas del Ebro", decía eufórico.

Al mismo tiempo que Zaragoza empezaba a tomar conciencia de su triunfo, estallaban los fuegos artificiales montados junto a la plaza dela Hispanidad y se encendía sobre la fachada del ayuntamiento el mensaje Felicidades, Zaragoza, sobre el que campaba el lema de la Expo: ZH2O.

En el recinto especialmente montado para la ocasión por El Periódico de Aragón se agolparon centenares de zaragozanos para festejar el acontecimiento.